Sueño de una noche de verano

martes, abril 24, 2012

No pases por Salamanca

Para mis lectores de Finlandia y Moscú, les voy a platicar de lo interesante que es vivir en Guanajuato.  Y mis 5 lectores, que no me dejarán mentir...

Si buscan Guanajuato en Internet, aparecerán muchas imágenes, pero la más representativa es la que muestra la ciudad capital desde el mirador del Pípila.  Sin embargo, si te jactas de ser orgullosamente guanajuatense deberás cumplir con las siguientes características:

1. Haber visitado por lo menos una vez en tu vida: las momias de Guanajuato, Cristo Rey, la Caldera, la tumba de José Alfredo, el Auditorio 3 Guerras, las calles subterráneas, el templo Expiatorio, el callejón del beso, el festival del Globo, el Teatro Juárez,  las fuentes de aguas danzarinas, el Festival Internacional Cervantino, el parque Explora, la Expo Bicentenario, la Alhóndiga de Granaditas, la Alberca en Valle, la zonas arqueológicas de Peralta, Cañada de la Virgen y Plazuelas... y creo que me quedo corto...

2. Haber comido: fresas, cajeta, charamuscas y trompadas, enchiladas mineras, acambaritas, gorditas de queso y migajas, pacharelas, guacamayas, carnitas, birria, caldos de oso, helado de sabores de Dolores Hidalgo y Juventino Rosas, cacahuates de Tarimoro y las paletas de yoghurt en el estadio.  ¡Sin olvidarme del tequila de Corralejo!

3. Haber comprado: unos zapatos de León, ropa de Uriangato y Moroleón, cerámica de Dolores Hidalgo y Tarandacuao, muebles de madera de Apaseo el Alto, vidrio soplado de San Miguel, joyería de plata y cuarzo en Guanajuato, alfeñiques en la temporada, y si te alcanza, pues un carro armado en Silao.

4. Tener especial admiración por: la música de José Alfredo, Pedro Vargas, Jorge Negrete, María Grever y Juventino Rosas, los murales de Octavio Ocampo, Diego Rivera y Salvador Almaráz, y sin contar a los Guanajuatenses ilustres que lucharon en las guerras de Independencia y Revolución...

¡Y la gran ventaja es que estamos en el centro de México! en 3 horas y media estás en el DF o en Guadalajara, en 7 horas en Monterrey... y a solo 6 horas de Puerto Vallarta o Ixtapa - Zihuatanejo.  No nos podemos quejar... En verdad que me gusta vivir aquí.

Yo que te iba a invitar a vivir a Playa del Carmen - comenta pícaramente una de mis lectoras.

lunes, abril 23, 2012

Diario de una mujer a dieta

Querido diario...  hoy comencé una dieta.  Necesito perder 8 kilos.  El nutriólogo me aconsejó escribir un diario donde debo poner mi alimentación, mi avance y mi estado de ánimo.  Estoy entusiasmada, y se que lo lograré.  Me compré un vestido rojo maravilloso que me quedará cuando termine la dieta.

Día 1: Queso blanco y cereal.  Mi humor está maravilloso.  Me siento más liviana, un leve dolor de cabeza tal vez...

Día 2: Una ensaladita rápida, un pan tostado y un yoghurt. Me siento muy bien. La cabeza me duele un poquito más fuerte, pero una aspirina lo soluciona...

Día 3: Me desperté en la madrugada con un extraño ruido... creí que era un ladrón, pero me di cuenta que era mi estómago... me tomé un litro de té... estuve en el baño el resto de la noche.  Nota: No tomar más té de manzanilla.

Día 4: Estoy comenzando a odiar la ensalada.  Me siento como una vaca pastando.  Estoy medio irritada, pero creo que es el clima... mi cabeza parece un tambor.  Mi compañera de trabajo se comió una torta cubana, pero yo resistí.  Nota: Odio a mi compañera.  Tiene cara de caballo.

Día 5: ¡Si vuelvo a ver un pedazo de queso blanco, vomito!  Mi almuerzo: una ensalada.  Me puse a leer para calmarme y comerme toda la ensalada...  Nota: No comprar más revistas de recetas de cocina.

Día 6: Estoy muerta. No dormí toda la noche.  Y lo poco que dormí soñé con un flan napolitano.  Mataría por un gansito... en vez de personas, veo chocorroles caminando...

Día 7: Fui al nutriólogo.  Adelgacé 250 gramos. ¡Qué! ¡Toda la pinche semana comiendo pasto! ¡Y luego el mendigo nutriólogo me dice que "es normal... que las mujeres tardan más en adelgazar y más a mi edad"! ¡O sea que aparte de gorda me dice vieja!  Nota: Cambiar de nutriólogo, aparte de caro me humilla.

Día 8: Hoy me despertó un pollo rostizado bailando en mi cama... ¡¡Lo juro!! Nota: Mis compañeros de trabajo me vieron raro...

Día 9: Hoy no fui a trabajar... pedí el día.  Me pasé el día viendo TV... hay un complot en mi contra pues todos los canales pasan recetas de cocina... hicieron pastel de zanahoria, camarones al coco y lasagna... ¡Todos comen y la gorda soy yo!  Nota: Comprar otro control remoto... el otro lo tiré por la ventana.

Día 10: Le di una patada al perro de mi vecino cuando se acercó moviendo la cola... En mi oficina me sacan la vuelta.  Nota: Comprar un cubre-teclado.  Al pensar en pizza babeo.

Día 11: Me comí una sopa... todo el día he eructado ajo.  Nota: No jugar al poker con el pollo rostizado... hace trampa...

Día 12: La balanza no se movió... ¡No perdí ni un mísero puto gramo!  Comencé a reirme a carcajadas... el nutriólogo me sugirió un psicólogo... creo que dijo psiquiatra o tratamiento, no me acuerdo...  Nota: No vuelvo al nutriólogo, lo único que hace es sacarme lana...

Día 13: El pollo rostizado me despertó y me presentó unos amigos.  La torta de pierna es una intelectual... la coca cola es muy graciosa y el pastel es un poco callado... estuvimos contándonos chistes hasta la madrugada...

Día 14: En la TV pasaron el concurso de Miss Universo y les re menté la madre a todas y cada una de las participantes... el pollo se enojó conmigo...

Día 15: He decidido terminar con mi dieta.  Me encabroné con el pollo y me lo comí... junto con la coca y la torta de pierna... ¡Ah! y fui a la tienda por unos putos Cheetos... Llegué de mejor humor a la oficina... Nota: Comprar helado en el wallmart... ¡Ah! Vender vestido rojo talla chica...

miércoles, abril 18, 2012

Bajo un olmo

Descubriendo tu aroma, soñé
Y mis sueños fueron tu almohada
Te descubrí como una gema preciada
Cuyo encanto siempre admiré

Y digo tu nombre y mi corazón grita
Guardando mi libro bajo mi cama
En este tiempo te has quedado con mi alma
Pétalo frágil de una flor marchita

Mándame esa letra tan añorada
Que presto contestaré a tu llamado
Distancia maldita de un abrazo deseado
Que necesito mucho de madrugada

Y mirándome, nerviosa en la brisa
En las callejuelas encerradas y oscuras
Una universidad y muchas locuras
Cómplice ajena de nuestra sonrisa

Y hoy bajo este árbol me encuentro
Tímido Olmo de mirada tierna
Cuyo dolor en su raíz encierra
Aunque el amor no lo mueve el viento